Carlos Molina, presidente de la FMP Puno, expresó que levantan la paralización “en cumplimiento a lo dispuesto por Asamblea Nacional y la unidad que siempre a caracterizado al gremio medico, comunicando además, que existen problemas de dicha región que no son abordados debidamente por los funcionarios”.
Así mismo, en documento remitido al presidente de la FMP, Julio Vargas, los médicos señalan que la tensión en Puno “ha sido agudizada por las actitudes autoritarias y que se permiten “cerrar las puertas” a los médicos para exponer la problemática que los aqueja”, en clara alusión al presidente regional, Hernán Fuentes.
Molina asegura que “siendo de conocimiento público la presencia del ministro de Salud (Hernán Garrido Lecca) en dicha región, los mismos participarán en una asamblea regional con presencia del presidente de la FMP, para verificar “in situ” la calamitosa situación en la que se encuentran los servicios de salud en la ciudad puneña”.
Por su parte, el presidente de la FMP, Julio Vargas La Fuente, manifestó su total respaldo a las medidas que dicha base regional ha tomado puesto que “esas actitudes no coadyuvan al trabajo conjunto con las instituciones gremiales en pro del fortalecimiento de la salud”.
Los galenos de Puno exigen es el respeto a la Ley del Trabajo Medico y demás normas que expresan claramente que los cargos de funcionarios de todo nivel tendrán que ser concursados.
De igual manera, reclaman el pago de las Asignaciones Extraordinarias por Trabajo Asistencial (AETAS) que se les adeuda desde abril del 2006, entre otros.
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