Ronaldo, entre el adiós y una leve 'esperanza'

Su carrera, en grave peligro tras tener que estar al menos nueve meses en el dique seco

Secadas ya las lágrimas que regaron el césped del estadio de San Siro, pero con una larga recuperación por delante, el futuro en el fútbol de Ronaldo está en cuestión. En Italia confían aún en el "Fenómeno", pero sólo él y su rodilla izquierda tienen la respuesta. Por lo pronto, Ronaldo ya está ingresado en París para ser operado bajo la supervisión de Gerard Saillant, el mismo que le operó hace años de idéntica lesión en la otra rodilla
Ronaldo tenía marcado en el calendario el partido de la próxima semana en Londres ante el Arsenal por la Liga de Campeones. Era la competición que le restaba al Milan para salvar la temporada. Era el torneo que deseaba ganar el atacante de 31 años, el único título que le faltaba en su excelso palmarés. Ronaldo no sentía como suya la Liga de Campeones ganada el pasado año por el Milan en Atenas. Llegó en enero y no pudo jugar un sólo minuto. Ahora era distinto.

Carlo Ancelotti, su técnico, lo mimaba ante los constantes problemas musculares. Jugó el domingo contra el Siena 45 minutos. El miércoles, ante el Livorno, volvió a salir tras el descanso. Sólo duró tres minutos. Su rodilla izquierda se retorció y cayó al suelo. "He escuchado un ruido extraño", dijo Marco Amelia, el portero del Livorno. Era el "crack" de la rodilla del milanista. ¿El "crack" final de su carrera?

"Le he invitado a creer en sí mismo: tiene unas capacidades físicas extraordinarias y creo que en algunos meses podrá volver a ser el campeón que es", exhortó hoy convencido Silvio Berlusconi, presidente del Milan. Ronaldo había adelgazado, se había dejado el pelo largo, estaba motivado de nuevo con la casaca "rossonera", a pesar de que las lesiones no dejaban de fustigarle desde julio. Quería merecerse la renovación del contrato, que expira en junio.

"El Milan no abandona a sus jugadores, sobre todo cuando se hacen daño", dijo el miércoles Adriano Galliani, vicepresidente del equipo. Esas mismas lesiones ya le atormentaron en el Real Madrid, de donde salió desmotivado y enfrentado con el técnico, Fabio Capello, la dirigencia y hasta la afición, harta de su displicencia y de su exceso de peso. El Real Madrid lo vendió barato. A partir de ahí el equipo -casualmente o no- resurgió y nadie echó de menos al "Fenómeno".

En Milán emprendió una nueva etapa en su trayectoria profesional, una carrera de obstáculos ante la que ahora aparece un muro. "He sentido el mismo dolor que cuando me rompí la rodilla en 2000", confesó el miércoles. También sus lágrimas y sus gritos recordaron a lo que se vivió en el Olímpico de Roma en un partido entre Inter de Milán y Lazio hace ocho años.

Ronaldo llegó en 1997 al Inter tras un año fantástico en el Barcelona. Su primera temporada de "neroazurro" fue también brillante, culminada con su extraña ausencia -poco explicada- de la final del Mundial de 1998 que perdió Brasil en París. El 21 de noviembre de 1999, en un partido contra el Lecce, Ronaldo se lesionó de gravedad en el tendón rotuliano de la rodilla derecha. Se le diagnosticó una debilidad congénita en los tendones de la rodilla y se le operó. El 12 de abril de 2000 regresó a las canchas. Fue la fatídica noche en el Olímpico romano en la final de la Copa de Italia.

Pasó más de un año para verlo de nuevo sobre la cancha. La meta era estar en el Mundial de Japón y Corea 2002 con Brasil. Y lo consiguió. Regresó al final de 2001 y tras el Mundial abandonó el Inter por sus problemas con el técnico Héctor Cúper para regresar a España, al Real Madrid.

Poco más de un año en Milán y de nuevo la mala suerte. ¿Se recuperará Ronaldo de una lesión que lo alejará del fútbol cerca de un año? "Los infortunios le han hecho caer, pero siempre tuvo la fuerza y las ganas de levantarse, algo propio de un gran campeón y un gran hombre", escribe hoy el diario 'La Gazzetta dello Sport'. "El Fenómeno podría ser ya casi un ex", agrega. Únicamente Ronaldo tiene la respuesta. Mientras llega, no paran de mandarle ánimos y no sólo Berlusconi. También el que fuera su gran valedor -luego "traicionado"-, Massimo Moratti, presidente del Inter, le envía su aliento.

"En este momento se puede hablar de que su carrera está en riesgo, pero tiene una fuerza de ánimo notable y un físico fuerte. Lo siento mucho por el jugador, pero, sobre todo, por la persona", dijo hoy Moratti. "El daño puede ser reparado y más ahora con los avances técnicos", le animó el ex médico del Inter Piero Volpi, testigo de la recuperación de Ronaldo en 2000. "No sería pesimista sobre su futuro. Tiene tiempo y posibilidades", agregó, dando esperanzas al que fue mejor jugador de 1996, 1997 y 2002 y que es el máximo goleador de la historia de los Mundiales con 15 tantos.