La campaña electoral por el sillón municipal ya se inició o al menos eso parece porque las puyas entre los contendores son cada vez más comunes. ¿Ya tienes en mente a un candidato? Recuerda que hay mucho en juego y no solo un simple voto…
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Falta muy poco para los comicios ediles, que se efectuarán el domingo 3 de octubre, el anticipo de lo que será la gran campaña política Para las elecciones generales, la misma que nos dará como resultado al nuevo Presidente de la República. Hay temas muy importantes en la agenda e innumerables demandas sociales, por eso los jóvenes debemos prestas mucha atención porque somos una gran masa de votantes que seremos “seducidos” por las promesas de los diversos candidatos.
Cada cierto tiempo la arena política peruana empieza a moverse. Muchos se hunden en ella, otros quedan enterrados hasta la cabeza, esperando su irremediable final. Están los que surgen sólo en estas épocas y de ahí vuelven a sus guaridas a esperar las próximas elecciones. Pero también aparecen nuevos especímenes que gracias a los electores logran conseguir un espacio y trabajo por muchos años. Te suenan algunos de estos apellidos: Rey, Del Castillo, Fujimori, Kouri o Flores Nano. En este contexto y siendo los universitarios lo que en el futuro seremos los próximos protagonistas de la historia y quienes elijamos a los nuevos gobernantes de este maravilloso país, es importante darle un vistazo a la realidad de nuestra política, de lo que pensamos justamente nosotros, los jóvenes acerca del panorama electoral que tenemos a la vuelta de la esquina.
La indiferencia en cifras
Hay que reconocer que el interés por este tema es muy escaso entre los jóvenes. Los tiempos en los que la política universitaria era semillero de los futuros líderes ideológicos del país son cosa del pasado. Esto no quiere decir que aún no salgan de las aulas personas interesadas en incursionar en este complicado mundo.
Según un estudio efectuado por la encuestadora CPI en el 2005, el 68% de los jóvenes universitarios no les interesa mucho los temas políticos, ellos se debe principalmente a la desazón que existe respecto al desempeño de los gobernantes, congresistas y alcaldes elegidos. El 80% manifestó estar desilusionado de las autoridades elegidas, destacando el rasgo de corrupción (91%) como el principal argumento de su posición.
El panorama no ha cambiado mucho, por eso, a falta de dos meses para las elecciones municipales ¿Ya sabes quienes compiten en esta valiosa justa electoral? ¿Has revisado, al menos, alguna de sus propuestas electorales? Tratemos de no tomarnos las cosas a la ligera y emitir un voto valioso por aquel candidato que consideremos tenga las mejores cualidades. Recordemos que “un país merece los gobernantes que elige”.
Tú decides
Hay muchas preguntas que todo estudiante universitario debe hacerse, sobre todo aquellos que van a votar por primera vez (que no son pocos) ¿Somos conscientes del poder que tenemos? ¿Cuánto nos informamos antes de decidirnos por uno u otro candidato? ¿Los tenemos como amigos o somos sus fieles seguidores en el Facebook y el Twitter?
Las encuestas que presentan a los candidatos que pretenden reemplazar a Luis Castañeda Lossio en el sillón municipal tienen a dos muy bien posicionados en la primera fila: Lourdes Flores y Alex Kouri. Más atrás están Susana Villaran, Fernando Andrade, Luis Iberico, el pastor Humberto Lay , el candidato por Acción Popular Gonzalo Alegría y otros casi desconocidos calificados en el argot político como “los pitufos”.
A pesar de que no tengamos muchas ganas de escucharlos, ellos serán por un tiempo los protagonistas de la agenda noticiosa y nosotros, queramos o no, los veremos en las más variadas actividades asistiendo a diversos e inusitados programas (como parte del marketing político) y sorteando las preguntas más impertinentes de los periodistas y la famosa “guerra sucia” de sus contendores.
No me interesa
Lo que más llama la atención es el bajísimo nivel de interés de los estudiantes universitarios, quienes no revisan la sección “política” de los diarios todos los días o si lo hacen es porque deben cumplir con algún trabajo que, para nuestro pesar, representa más del 30% en la nota final y justamente fue encargado en aquel curso en el que no estabamos tan bien que digamos. Claro que existen algunas excepciones que se evidencian en los candidatos a las elecciones universitarias que son un simulacro del deber cívico que tenemos como ciudadanos. Algunos verdaderamente se esmeran por representarnos y buscar soluciones a los diversos problemas que afrontamos en las aulas como estudiantes. A pesar de eso, la tendencia es que no haya una preocupación entre los alumnos por saber qué es lo que está sucediendo en el país y mucho menos por nuestros gobernantes. Un gran número de votantes, entre los que destacan los universitarios, piensa que “ya no se puede hacer nada” debido a ello obviamos el tema, aunque podríamos estar equivocados.
Por eso se recuerda mucho los escándalos protagonizados por un sinnúmero de congresistas que van desde contratar ilegalmente a sus familiares, beneficiarlos con licitaciones, fraguar consumos de pollo a la brasa por más de S/.5,000 soles, viajar por todo el mundo sin justificación alguna, hasta el maltrato a animales indefensos . Este recuento es solo del último año y confirma que atravesamos por una verdadera crisis de representatividad política.
Para Nayha Carrillo, quien estudia comunicaciones en la UPC, para quien las denuncias le “llaman la atención”, pero reconoce que “de política no sé mucho, ya que no me interesa porque no está bien manejada”.
Al parecer este desinterés de los jóvenes se debe en parte a la prense, la cual aborda, en muchos casos, temas intrascendentes y frívolos, restándole seriedad a la coctelera informativa. Es sabido que el periodismo se maneja por tendencias e intereses y esto hace dudar a los futuros electores. Como bien dicen “nadie da puntada sin hilo”. Por eso, un elector debe ser consciente de que su voto es muy importante.
“Uno debe ser muy suspicaz para encontrar información que valga la pena porque últimamente uno se puede encontrar bombardeado de prensa amarilla o sensacionalista. Hay que tratar de hacer una buena selección. Incluso ahora se puede observar como diarios o programas de la televisión están perdiendo credibilidad”. Dice Kevin Cordova, alumno de biología de la Richi.
Parece que el interés por temas políticos solo sale a la luz a raíz de los escándalos. Asi lo considera Luis Alberto Solano, estudiante de derecho de la PUCP y muy comprometido con el cambio de las futuras generaciones: “Es inevitable no enterarse de política, es casi imposible no saber quienes son los que nos representan pues la mayoría de ellos se vuelven mediáticos gracias a sus escándalos o aparecen por el simple hecho de figurar”, afirma.
Brújula Perdida
La política de antaño se caracterizaba por las tendencias ideológicas que se manifestaban en el escenario de las campañas o justas electorales.
Los tiempos han cambiado y, aunque existen sectores que consideran que la derecha y la izquierda todavía existen, la realidad dice que todos vienen alineando , con ciertas variaciones, hacia un camino en común: El poder.
Mas allá de las representaciones de las supuestas posiciones políticas de los candidatos lo que los universitarios –y todo el país- reclaman es mayor sinceridad o como muchos dicen “menos mentiras”. “Cualquier persona puede ser político. Son muy hábiles para pintártela bonito, te prometen cosas que cualquiera puede hacer, pero jamás cumplen”, reclama indignada María Lía Rojas, quien estudia ingeniería Industrial en la U. LIMA. Este es, acaso, el reclamo de toda una generación.
Esta crisis nos lleva a pensar que no existen partidos políticos fuertes cuyos militantes sigan una misma línea. Es por esto que se han dado tantos casos de transfuguismo, termino acuñado para referirse a quienes cambian de movimiento ideológico como si fuera su ropa de diario.
Muestra de ello , es que el número de movimientos políticos independientes se ha incrementado considerablemente, pero lo que muchos no saben es que en sus filas cuentan con viejos zorros representantes de los partidos políticos tradicionales que tratan de reciclarse y volver al poder como si se tratara de jóvenes ansiosos de un cambio, cuando en realidad solo quieren “repetir el plato”.
En este país se vota por rostros y no por la continuidad de una ideología. Así lo cree Nayha, para quien los políticos al menos esos rostros por los que votamos, ya no representan las tendencias de antaño, por el contrario solo se aprovechan de ciertas fachadas para llegar, a toda costa, al poder.
Por su parte, Luis Alberto cree muy poco que las viejas tendencias de izquierda, derecha o centro aún se mantengan vigentes. “No creo que sea útil perder el tiempo tratando de definirse dentro de una tendencia política, pues también estas terminan generando fanatismo y sesgan la visión. Las propuestas políticas deben partir desde la objetividad científica, técnica y racional”, señala.
A pesar de todo…
No se puede negar la importancia de la política en el desarrollo de nuestro país. Para la comunidad universitaria, aunque no tenga una participación y representatividad directa como en décadas pasadas, sigue siendo un tema relevante y todavía vigente.
Lamentablemente, el mal manejo que se le ha dado con los escándalos de los congresistas, el larguísimo caso de corrupción de los ahora famosos Petroaudios y si vamos más atrás, cuando éramos infantes, hace 10 años, con la denominada dictadura fujimontesinista, ha contribuido con la desesperanza que los jóvenes sienten hoy.
Con estos antecedentes es casi imposible que las nuevas generaciones no tengamos algún tipo de prejuicio contra el poder que nos controla y suponer que una elección democrática, al menos por lo que parece, ya no es suficiente para “confiar”.
“Política sucia y manoseada”. “Corrupción y abuso de poder”, el “único interés es ganar plata y no buscar el bienestar común”, “escándalos”, y otra vez “corrupción”, son solo algunas ideas sieltas de los jóvenes con respecto al tema, según una investigación realizada por el Instituto de Defensa Legal (IDL) hace dos años. Con estos criterios, ¿Cómo poder sacar adelante un país? Para Luis Alberto, la política no debe ser vista como los poderes de nuestro estado, sino que “debería ser la ciencia que utilice a todas las demás ciencias y artes en beneficio del hombre. Tenemos que entender que no solo ocupando cargos públicos se hace política, sino también con iniciativas propias desde cualquier ámbito en el que nos desenvolvamos”, señala sin faltarle razón.
¿Podemos hacer algo?
Estamos a pocos meses de una nueva “fiesta electoral”. Aunque la desidia parezca sea la constante, el hecho de que el voto sea obligatorio y las multas impagables para muchos de nosotros, hará que el próximo domingo 3 de octubre todos, viejos y jóvenes en estas lides, asistamos a las urnas en busca de nuestros próximos representantes ediles.
Ya sabes que es importante conocer a tu candidato u no votar por votar o simplemente viciar tu voto, a fin de cuentas es un deber que tenemos como ciudadanos, no seas indiferente y trata de leer algo sobre los planes de gobierno de los aspirantes al sillón edil, para que luego no tengas motivos de lamento por su inoperancia.
Esperemos que los alcaldes elegidos hagan una buena labor y nos demuestren que la cosa puede cambiar y los jóvenes vuelvan a creer en la política peruana, aquella que tuvo gran intensidad en años pretéritos y que la universidad sea otra vez el semillero de grandes ministros, legisladores y gobernantes que nuestro país necesita a gritos.
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